No te asustes cada vez que me vaya. Vuelvo, siempre
vuelvo.
No me gustan las despedidas, pero saber que estarías
esperando mi regreso hizo que la partida no fuera tan dura. Lisboa me ha
acogido durante 5 días increíbles y después de un tren que no llegó y mis
nervios por volver, conseguí dos billetes de autobús que me han traído de
vuelta lo más rápido posible. 17 horas de viaje, por lo menos he podido dormir
algo en el trayecto e increíblemente he tenido tiempo hasta de soñar contigo.
Ojalá hubieras podido ver la ciudad por la noche, alejándose, volviéndose cada
vez más pequeña hasta quedarse atrás con sus miles de lucecitas y todos esos
recuerdos que me guarda. Esta vez no has venido conmigo, pero nuestra lista de planes
pendientes se va haciendo grande y sé que algún día no me tocará tener que
contarte mis viajes para que sepas cómo han sido. Por una parte me ha dado pena
volver, pero por otra ansiaba la vuelta ya desde antes de marchar. No sabes las
ganas que tenía de volver a verte, de morderte el labio inferior y que me
devolvieras la jugada. De escribirte en la espalda con los dedos para que
adivinaras todas las letras y me respondieras con la mirada.
Antes de que me fuera pudimos tachar uno de nuestros planes
de la lista y hoy, nada más volver, hemos completado otro más.
Suma y sigue.
Sophia
La vista desde nuestro balcón |
Lisboa :) |
Vista del puente 25 de Abril por la noche. |
Una de las plazas cerca de nuestra casa. |
Tranvías. |
Wooow! Me gustó mucho esta entrada, y la parte de "No sabes las ganas que tenía de volver a verte, de morderte el labio inferior y que me devolvieras la jugada" me hizo acordar de mi enamorado.
ResponderEliminarSi puedes pasas por mi blog www.cegadaporlalectura.blogspot.com
Cuídate, besos ♥